El dolor de cuello intenso o constante en los celíacos puede representar un síntoma verdaderamente desconcertante para las personas con enfermedad celíaca. Uno de los principales problemas de la enfermedad celíaca es que, cuando no se trata, desgasta el cuerpo y, por lo tanto, puede vincularse a casi cualquier síntoma. Una enfermedad que es responsable de una gama tan amplia de síntomas y condiciones secundarias a menudo se etiqueta como la culpable de cualquier dolencia que ocurre en un paciente celíaco. Sin embargo, el hecho de que muchos celíacos sufran dolor de cuello no se correlaciona necesariamente con la enfermedad en sí.
Sobre el dolor de cuello en celíacos
El dolor de cuello es un síntoma bastante común en los adultos. De hecho, a medida que una persona envejece, es más probable que sufra dolor crónico de cuello o espalda debido al debilitamiento general de los músculos y las articulaciones que es tan típico del proceso de envejecimiento. El estilo de vida y los factores ambientales también contribuyen a problemas como el dolor de cuello. Muchas personas llevan estilos de vida sedentarios, particularmente aquellos que pasan mucho tiempo estirando el cuello frente a la pantalla de una computadora. Dichos hábitos pueden conducir a una rigidez y tensión permanentes de ciertos músculos clave del cuello y la parte superior de la espalda. De hecho, la rigidez de estos músculos a menudo puede ser un factor influyente en las migrañas crónicas.
El cuerpo está formado por una serie de sistemas complicados que interactúan y, a primera vista, puede ser difícil diagnosticar el vínculo entre la enfermedad celíaca y el dolor de cuello. En su mayor parte, la mayoría de los casos que involucran dolor de cuello en celíacos implicarán tensión muscular, una condición relativamente poco relacionada con la enfermedad celíaca. Sin embargo, la enfermedad celíaca tiene la capacidad de afectar múltiples órganos y sistemas dentro del cuerpo, y ciertos aspectos de esta enfermedad pueden hacer que un celíaco sea más susceptible al dolor muscular crónico.
El papel de los electrolitos
La enfermedad celíaca no tratada puede causar estragos en el tracto digestivo ya que las proteínas del gluten no digeribles desencadenan una reacción inmunológica que lanza un ataque a gran escala en las vellosidades intestinales de un individuo. La mayoría de las personas equiparan este colapso digestivo con un dolor abdominal severo y síntomas excretores como diarrea y estreñimiento, pero todavía hay otros factores en juego. Las molestias digestivas, especialmente los síntomas como la diarrea, pueden provocar un desequilibrio de los electrolitos del cuerpo, como el sodio y el potasio. Los electrolitos hacen algo más que contribuir al peristaltismo de los músculos intestinales involuntarios. Estas partículas esenciales cargadas eléctricamente influyen en la actividad muscular en todo el cuerpo. Por lo tanto, una persona que carece de las cantidades y proporciones adecuadas de tales electrolitos puede esperar tener todo tipo de síntomas que involucren a los músculos.
La rigidez crónica, el debilitamiento y la actividad muscular espástica se encuentran entre los síntomas más comunes que pueden afectar los músculos como resultado de un desequilibrio electrolítico. Una persona con un equilibrio de nutrientes ideal será capaz de asumir más estrés físico sin consecuencias graves que un cuerpo no saludable que carece de elementos dietéticos clave. Las personas con enfermedad celíaca no tratada pueden encontrar que trotar o cualquier forma de ejercicio tendrá consecuencias perjudiciales. Sus músculos se sentirán extremadamente doloridos durante días después de una actividad, a pesar del acondicionamiento. O es posible que su sistema no pueda hacer frente al ejercicio desde el principio.
Por lo tanto, es posible que el dolor de cuello en los celíacos se vea exacerbado por ciertos aspectos de la enfermedad celíaca, aunque en la mayoría de los casos el dolor se desencadenará por factores ambientales y de estilo de vida.
Casos más graves
Como se mencionó anteriormente, la enfermedad celíaca puede desencadenar todo tipo de afecciones secundarias, desde diabetes hasta lupus. Cuando el cuerpo se debilita y queda desprovisto de nutrientes por una enfermedad no tratada durante mucho tiempo, como la enfermedad celíaca, es más vulnerable a cualquier tipo de ataque relacionado con el medio ambiente o los gérmenes. No todos los dolores de cuello están relacionados con los músculos. Hay varias glándulas linfáticas ubicadas en el cuello, así como la siempre importante glándula tiroides. El dolor de cuello que simplemente no parece una distensión muscular siempre debe ser investigado por un médico desde el principio.
Consideraciones de tratamiento
El dolor de cuello relacionado con los músculos a menudo se puede aliviar con mejoras en la dieta, particularmente con frutas frescas crudas y jugos de vegetales que son ricos en vitaminas, minerales y electrolitos. Evite las bebidas electrolíticas comerciales, ya que están cargadas de azúcares y productos químicos que pueden dañar aún más su equilibrio electrolítico. El masaje de tejido profundo, el ejercicio adecuado y la acupuntura también pueden ayudar a aliviar la rigidez y las distensiones musculares crónicas.