Siempre estudiamos el comportamiento de los animales con el objetivo de extraer la máxima información sobre ellos y su relación con el mundo que los rodea. Entender los mensajes que transmiten nuestras mascotas es fundamental para saber cómo relacionarnos con ellas y cómo cuidarlas correctamente.
Los perros adoptan muchas conductas que, aunque a simple vista puedan parecer curiosas, esconden señales sobre su estado de ánimo, su estado de salud o sobre sus necesidades. Una conducta que sorprende es la de morderse la cola, pero por gracioso y extraño que parezca, morderse la cola puede indicar problemas importantes en los perros a los que deberás prestar atención. Si quieres descubrir por qué los perros se muerden la cola y cómo evitarlo o ayudarlos, en unCOMO te recomendamos que sigas leyendo este artículo.
Heridas
Probablemente te hayas preguntado en más de una ocasión por qué mi perro se persigue la cola. Hay muchas causas que lo explican: una de ellas es la aparición de heridas. Si a tu can le encanta explorar nuevos territorios y estar en la naturaleza, es fácil que se haga heridas con ramas o plantas.
Por ello, deberás revisar periódicamente el estado de su piel y del pelaje para comprobar que no tiene heridas y, en caso de tenerlas, curarlas. Si le aparece una en la cola querrá morder y lamer la zona para aliviar el escozor. Es un comportamiento lógico, pero debes tratarlo para evitar que se infecte.
Parásitos externos
La aparición de parásitos e insectos externos sobre el cuerpo del perro le provocará molestias y picores. Para deshacerse de ellos, tu mascota intentará morderse para matar a las garrapatas o pulgas que tenga.
Procura desparasitar a tu perro de forma interna y externa para que no contraiga enfermedades ni picores molestos que le hagan morderse la cola y otras zonas.
En este artículo podrás consultar Cómo desparasitar a mi perro y cada cuánto tiempo hacerlo.
Problemas en la piel
Algunas enfermedades como la sarna, los hongos y las alergias atacan severamente el estado de la piel de los perros. Para paliar los dolores, los canes intentan a menudo morderse el rabo y aquellas partes del cuerpo especialmente irritadas.
Si observas que se rasca, lame y muerde con frecuencia la cola y otras zonas, revisa la piel de tu mascota y coméntale a un veterinario el problema para encontrar la mejor solución posible. Aquí puedes consultar las Enfermedades de la piel comunes en perros.
Problemas con las glándulas anales
Un mal funcionamiento de las glándulas anales de los perros, especialmente si no se logran vaciar como es debido y diariamente, puede derivar en problemas de salud como quistes, inflamaciones y otro tipo de enfermedades. A raíz de esto, tu can querrá morderse la cola y rascarse la zona del ano para encontrar una manera de aliviar esas molestias.
Para solucionar este problema, lleva a tu perro al veterinario para que le examine a conciencia y logre curar o vaciar sus glándulas anales.
Hernias y otros problemas en la columna vertebral
Tal y como sucede en los humanos, los perros también pueden padecer problemas relacionados con la columna vertebral y los huesos. Condiciones como la osteoartritis (degeneración progresiva del cartílago articular que provoca la creación de un tejido nuevo en las articulaciones y causa un gran dolor) y las hernias discales son comunes en los perros adultos con el paso de los años.
Si estos problemas se desarrollan en la cola o las lumbares, el perro tratará de mordisquear la zona para solucionarlos a su manera. Como en los otros casos, en unCOMO te recomendamos que acudas a un veterinario para hallar el mejor tratamiento y aliviar las molestias.
Aburrimiento
Si no sabes por qué los perros se muerden la cola, especialmente si el tuyo nunca lo ha hecho y comienza a morderla repentinamente, puede que sea por aburrimiento. Algunos canes no suelen morderse el rabo porque no han padecido un problema de salud ni de conducta, pero en un momento dado lo han hecho para jugar y entretenerse.
Si dejas que tu perro se muerda la cola para jugar, pronto se convertirá en un problema serio. Impide que se convierta en un hábito jugando con él o proporcionándole juguetes que capten su atención.
Saber interpretar las señales que tu perro te da son claves para entender qué necesita. Descubre más en nuestro artículo Cómo saber si mi perro se siente solo.
Problema de conducta
En algunos casos, lo que empieza como un simple juego acaba derivando en un gran problema de conducta y tu perro seguirá mordiéndose la cola sin que logres corregir fácilmente ese comportamiento. Además, si se aburre constantemente, no le prestas atención, se siente abandonado o tiene problemas de socialización, optará por comportarse de esta manera.
Si no tiene problemas de salud relacionados y te preguntas cómo hacer que tu perro deje de morderse la cola, consulta con un etólogo canino (especialista en el comportamiento de los perros) para que te dé unas pautas con las que trabajar con tu pequeño peludo y, de esta manera, te ayude a encontrar una solución.
Cómo hacer que mi perro deje de morderse la cola
Pese a detectar este problema y querer solucionarlo, es probable que no sepas qué hacer cuando tu perro se muerde la cola. En unCOMO queremos ayudarte y por eso te damos las siguientes recomendaciones para que lo consigas:
- No le regañes si se muerde la cola en tu presencia. Evita este impacto negativo y opta por distraerle para que no lo vuelva a hacer saliendo a pasear o jugando. De esta manera, se agotará y no tendrá ganas de morderse la cola.
- Intenta que no se quede mucho tiempo solo en casa para evitar que se sienta abandonado. Además, déjale juguetes a su alcance para que esté entretenido. Ayudarlo a entretenerse y darle la atención que necesita son excelentes soluciones para que tu perro no se muerda la cola.
- Los castigos no funcionarán, igual que una postura demasiado blanda. Si repite la acción varias veces, dile 'NO' alto y claro. Después, llévatelo de paseo, acaríciale o jugad juntos para que se distraiga.
- Corre con él, juega y dale recompensas para que no acumule mucho estrés y opte por morderse la cola para canalizar esa tensión.
- Si has aplicado todas estas recomendaciones y tu perro mantiene la misma conducta, consulta con el veterinario para encontrar un diagnóstico claro y la mejor solución.