Si en casa tu perro es uno más de la familia, seguro que no solo te preocupa que esté sano y bien alimentado, sino también que esté a gusto en su entorno. Aunque no hable, tu mascota tiene mil formas de expresar su estado de ánimo con señales que es importante saber reconocer. El comportamiento y el lenguaje corporal de un perro feliz no tiene nada que ver con el de un animal triste, estresado o incluso deprimido y si prestas atención a algunos signos muy concretos, sabrás cómo se siente tu fiel amigo. Descubre en este artículo de unCOMO las claves para responder a tu duda "¿cómo saber si mi perro es feliz?", porque si tu mascota está anormalmente triste, puede que necesites consultar con un veterinario o un etólogo.
Mueve la cola
Es uno de los signos, que todos conocemos, con los que un perro expresa su alegría. Cuando un can mueve la cola significa que está contento. Puede hacerlo de manera lenta y pausada, como ‘saludando’, o con una sorprendente velocidad y energía cuando está ‘loco de contento’. En cualquier caso, es siempre una buena señal de tranquilidad y felicidad.
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Tiene una expresión relajada
Aunque no sea un signo tan evidente como mover la cola, el lenguaje corporal de tu perro expresa claramente su estado de ánimo, solo hace falta ser un poco observador. Un perro feliz presenta una mirada relajada con suave parpadeo, su boca está ligeramente abierta y sus orejas no muestran tensión. Detalles como el hocico arrugado mostrando los dientes, el cuerpo tenso o tembloroso y las orejas bien levantadas pueden indicar que está a la defensiva, malestar o tristeza.
Come bien
Es otra de las señales básicas a las que hay que prestar especial atención, porque la pérdida de apetito en los animales domésticos siempre debe ponernos sobre alerta. Si tu perro lleva unos días desganado y dejándose prácticamente toda la comida, puede que tenga alguna enfermedad que hay que tratar y también puede ser que, simplemente, esté triste por algún motivo. ¿Pasa todo el día solo en casa y cuando llegas no ha comido? Tal vez es la forma de expresar su disgusto por sentirse abandonado. Por tanto, si ves que sí va comiendo bien es un signo de que tu perro es feliz.
Duerme a gusto
Exactamente igual que ocurre con las personas, el sueño es, junto al buen apetito, otro signo evidente de salud y bienestar. Si tu perro descansa estupendamente por las noches y a lo largo del día es que está feliz y sin ‘preocupaciones’.
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Disfruta jugando
Si te preguntas si tu perro es feliz, simplemente repasa su actividad diaria. Si en ella no faltan los divertidos ratos de juegos, entonces está lleno de vitalidad y muy contento. Un perro feliz se lo pasa fenomenal lanzando con su hocico una pelota u otros juguetes al aire y volviendo a atraparla. Además, le encanta llevártela y ofrecértela para que juegues con él. El juego es una actividad física fundamental para el animal y si participa en cada uno que le propongas, es que es feliz contigo y en su entorno.
No quiere estar solo
Los perros son animales muy sociables y cuando se sienten bien les gusta estar en compañía del resto de la familia. Si rehúye estar con vosotros y permanece largos periodos de tiempo acurrucado en un rincón, su conducta resulta anómala y nuevamente puede que esté enfermo, que se sienta triste o que tenga algunos problemas de socialización.
Busca caricias
Los mimos y las caricias les encantan y no se cansan de recibirlas cuando están tranquilos y alegres. Si tu perro, al verte, primero mueve la cola y luego se tumba panza arriba o se te acerca dándote cabezazos y pidiendo caricias, confía en ti y es feliz.
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Ladra y vocaliza
Es lo más parecido que tienen los perros al habla humana y hay que saber escucharlos. Por supuesto, todos los perros ladran pero un perro feliz ladra con moderación, es decir, no se pasa todo el día ladrando (tal vez lo haga cuando pasa muchas horas solo y encerrado, algo que no les gusta). Además, cuando es feliz tiene un ladrido vivo y alegre, sin gruñidos graves, que expresan agresividad o miedo, y sin lastimeros aullidos que indican, con claridad, pena y tristeza.
Quiere pasear siempre que se lo propones
¿Tu perro ya se sabe el horario de vuestros paseos y cuando se acerca el momento te espera impaciente? Pueden llegar a ser tan listos como para reconocer que llega ese momento que tanto les gusta y esperar en la puerta impacientes dando saltos de alegría. Seguramente, aunque se lo propongas en cualquier otro horario querrá ir corriendo a la calle. Si tu mascota está deseando salir contigo a pasear y al llegar a al parque, que tanto le gusta, salta y corre sin parar, no hay duda de que es un perro feliz.
Tiene curiosidad
También a los perros les encanta curiosear, para descubrir y aprender cosas nuevas. Olisquear durante el paseo, acercarse a otros perros moviendo la cola en señal de amistad, estar dispuestos a entrenar nuevos ejercicios contigo (por ejemplo, dejando que le enseñes a ‘dar la patita’) son señales caninas de bienestar y felicidad. Si un perro está alicaído, no siente interés alguno por lo que le rodea ni por lo que tú puedas indicarle... algo le ocurre y quizá sea que no es feliz porque no se cubren sus necesidades básicas.
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