No es muy común pero sí que es probable que un perro se enganche con otro perro y pueda estallar una pelea entre ambos. En estos casos, si el dueño no está atento a lo que sucede, la pelea puede ir a más y pueden hacerse heridas profundas que pongan en riesgo a tu mejor amigo. Por eso, es importante que siempre llevamos atado al perro cuando lo saquemos de paseo y que solo lo soltemos cuando veamos que el territorio en el que se encuentra y los perros que hay en él no son hostiles, solo así, el animal podrá disfrutar de una sesión de juegos y diversión sin riesgo alguno. En este artículo de unCOMO vamos a descubrirte qué hacer si a tu perro le muerde otro perro para que sepas cuál es el mejor modo de proceder en una situación como esta.
La importancia de llevarlo al veterinario
Lo primero que tienes que hacer si a tu perro le muerde otro perro es llamar a tu veterinario para ir de urgencias a la clínica. Este es el primer paso esencial que te garantizará cuidar del animal al máximo y evitar que su situación pueda agravarse. Aunque externamente no le veas heridas en su cuerpo, lo cierto es que las mordeduras que se realizan los perros son muy profundas ya que los colmillos de estos animales son muy puntiagudos, por tanto, puede ser que por fuera no le veas ninguna marca pero que, por dentro, tu perro padezca una hemorragia interna que puede ser peligrosa.
Pero no solo eso: por pequeña que sea la herida, si tu perro ha sangrado levemente, se puede haber contagiado con algún germen o bacteria que el otro animal podía tener en la saliva. Con el mordisco, el animal ha podido penetrar gérmenes en el cuerpo de tu perro y, al no tener salida exterior, se quedarán en la sangre del animal.
El veterinario es el especialista encargado de examinar con detenimiento a tu perro y observar las heridas y/o los mordiscos que ha sufrido tu animal. Deberá hacerle él la primera cura rasurando el pelo con cuidado para evitar dañarle; en este sentido es importante que tú no le cortes el pelo sino que sea siempre un experto para evitar hacerle cortes de más o hacerle daño.
En este otro artículo de unCOMO te contamos cómo detener una pelea de perros.
Primeros auxilios a un perro mordido
Pero, sí que es cierto, que antes de llevarlo al veterinario, puedes seguir una serie de cuidados que te ayudarán a cuidar de tu perro herido y evitar que las lesiones o las heridas puedan ir a más.
A continuación, vamos a descubrirte los primeros auxilios que puedes prestarle al animal durante el trayecto a la clínica veterinaria y con los que conseguirás evitar agravar la situación:
- Limpia las heridas con suero, agua o yodo para eliminar las bacterias o los gérmenes que puedan haber penetrado en el cuerpo de tu perro. Hazlo con suavidad y limpiando bien tus manos antes de entrar en contacto con el cuerpo del animal.
- Cubre la herida con gasas para protegerla de otros agentes nocivos externos que puedan poner en peligro al animal o infectarle la herida.
- Ponle la campana o bozal al perro para evitar que se muerda la herida o que, al lamerla, se quite la gasa o se infecte la herida.
Tratar las hemorragias de un perro al que le han mordido
Si a tu perro le muerde otro perro es probable que le haya salido una hemorragia que pueda ser difícil de controlar. Lo primero que te recomendamos es que no pierdas los nervios, las mordeduras pueden provocar la aparición de mucha sangre y lo que menos necesita el animal es que nos pongamos histéricos al verla. Tienes que transmitirle a tu perro que todo va bien y que no pasa nada, así que mantén la calma y no te alarmes.
En el caso de que esté saliendo mucha sangre, lo que te recomendamos es que intentes parar la hemorragia con una gasa o con un paño. Tendrás que presionar bien la zona y, siempre, lavarte primero las manos para que no haya riesgo a infección. Con la sangre controlada, ya podrás ir directamente al veterinario para que le dé los cuidados que tu perro necesita para sentirse mejor.
Cómo tratar las heridas en zonas sensibles
En el caso de que a tu perro le hayan mordido en el cuello o en una zona cercana a la columna vertebral, tendrás que tranquilizarle y evitar que haga movimientos demasiado bruscos. Para llevarlo al veterinario, lo mejor es que intentes inmovilizarlo y trasladarlo en algo parecido a una camilla de hospital, una superficie rígida que mantenga recta la zona.
Si tu perro se ha quedado inconsciente ya sea por la pérdida de sangre o por la gravedad del mordisco, lo que tienes que hacer es sujetarle la cabeza en algo procurando que no le presiones demasiado el cuello. Así, evitarás que pueda tragarse su lengua. Llévalo inmediatamente al veterinario para que le dé los cuidados que necesita.
Cómo cuidar a tu perro si le han mordido
Ahora que ya sabes qué hacer si a tu perro le muerde otro perro, a continuación vamos a descubrirte los cuidados que necesitará tu can que le prestes los días posteriores al accidente. Tienes que seguir siempre la prescripción del veterinario dándole al animal las medicinas y curas que requiera pero, en términos generales, un perro herido deberá ser cuidado de la siguiente manera:
- 2 o 3 curas al día: las curas están indicadas para limpiar la herida y evitar que alguna infección pueda poner en peligro la cicatrización de la misma. Mantener esta zona limpia y en perfectas condiciones permitirá que el cuerpo drene la pus y que, poco a poco, se vaya recuperando. Normalmente se suelen hacer dichas curas con agua oxigenada y gasas aunque deberás consultarlo con tu veterinario.
- Observa el comportamiento de tu perro: es importante que estés más pendiente que nunca de tu perro. Observa su cuerpo y la herida y, en caso de que detectes alguna anomalía o algún color extraño, acude al veterinario. También fíjate si está más apático de lo normal o desganado, al principio puede ser una reacción normal, por el trauma, pero con los días debería recuperarse. Si no lo hace, llévalo a la consulta.
- Un lugar tranquilo: ten en cuenta que la pelea que ha vivido tu animal seguramente le ha producido un alto nivel de estrés y ansiedad, por tanto, es recomendable que le ayudes a que pueda estar en un entorno tranquilo, confortable y seguro para que, así, pueda recuperarse emocionalmente lo más pronto posible.
- No lo bañes: se recomienda que, hasta que la cicatriz no esté completamente cerrada, no bañes a tu perro a no ser que sea imprescindible. El animal estará un poco dolorido en esa zona y, por tanto, bañándole solo conseguirás rozarle y producirle dolor.