Nos encanta compartir el máximo tiempo posible con nuestro perro y, a veces, compartir algo de nuestra comida. Debemos prestar atención a qué alimentos podemos dar a nuestras mascotas y cuáles son potencialmente peligrosos para su salud. Aunque no existe ningún alimento de consumo humano que consumido en cantidades pequeñas pueda matar a un can, sí los hay que son muy perjudiciales para su salud y en grandes cantidades pueden llegar a intoxicarlos. Una de las dudas más frecuentes en este sentido es: ¿los perros pueden comer frutos secos?, ya que a la mayoría les encanta su olor y al vernos comerlos nos piden un poco. Si sientes curiosidad por conocer la respuesta no dejes de leer este artículo de unCOMO en el que encontrarás todos los detalles.
¿Los perros pueden comer frutos secos o no?
Los perros SÍ que pueden comer frutos secos y, de hecho, tras diversos estudios realizados por veterinarios especialistas se ha llegado a la conclusión de que es bueno dar frutos secos a los perros de vez en cuando y en pequeñas cantidades, así como algunas semillas. Hasta hace poco tiempo se creía que estos alimentos eran tóxicos e incluso mortales para los canes, pero nada más lejos de la realidad.
Para el organismo de un can el nivel de toxicidad de cualquier alimento apto para el consumo humano, y habitual en nuestra alimentación saludable, realmente depende de la dosis. Es decir, más que el alimento que se le da al can, el problema aparece cuando nos excedemos en las cantidades que les damos y, de hecho, estas suelen ser realmente elevadas para llegar a causar problemas de salud serios o incluso la muerte.
Por esto, en dosis moderadas no es habitual que los frutos secos sienten mal a los canes sino al revés, lo normal es que les sienten bien puesto que les aportan numerosos beneficios. Pero, aunque sean un alimento bueno para ellos, como hemos dicho, solo lo es en pequeñas dosis y como un complemento de la alimentación habitual, nunca como base de esta, o como una golosina o premio. Es decir, a un can no se le pueden dar estos frutos todos los días ni un plato lleno.
Conoce aquí Cómo hacer comida casera para perros y logra una dieta natural y saludable para tu mascota y recuerda incluir de vez en cuando un poco de frutos secos en su alimentación.
Beneficios de los frutos secos para los perros
En las cantidades adecuadas y de forma moderada comer frutos secos, ya sean avellanas, almendras o nueces entre otros, aporta diversos beneficios para la salud y el bienestar de un perro gracias a su composición nutricional:
- Energía: este tipo de alimentos están repletos de energía saludable gracias a las calorías que contienen en forma de proteínas vegetales así como a los aceites y grasas insaturadas o buenas.
- Ácidos grasos saludables: estos alimentos tienen un alto nivel de ácidos grasos omega como el 3 y el 6 y otros ácidos grasos buenos como el ácido linoleico.
- Minerales: añadiendo estos alimentos de forma moderada en la dieta de nuestra mascota estaremos aportándole minerales como potasio, calcio, selenio, zinc, hierro y fósforo principalmente.
- Antioxidantes: estos frutos aportan un alto grado de vitamina E y de las del complejo B que son muy antioxidantes.
Gracias a estos nutrientes los canes pueden obtener energía para llevar a cabo su rutina de entrenamiento o disfrutar plenamente de un día en el campo o la playa, además de poder combatir mejor el estrés y la oxidación del organismo y estimular su sistema inmunológico.
Los mejores frutos secos para perros
Aunque son varios los alimentos de este tipo que son beneficiosos para los canes se recomienda siempre dar alguno de los mejores frutos secos para ellos:
- Avellanas
- Almendras
- Nueces
- Cacahuetes
Así, si te preguntabas si los perros pueden comer almendras de vez en cuando o si los perros pueden comer nueces ahora ya sabes que sí. Por lo tanto, si te preocupabas porque pensabas “mi perro se ha comido una nuez” o si le das alguna suelta muy de vez en cuando como premio no debes preocuparte. En cambio si te excedes en la cantidad que le das o le das diariamente estos frutos pueden producirle vómitos, diarreas, mareos, calambres musculares, rigidez, debilidad y fiebre entre otros síntomas. Por lo tanto, en caso de observar alguno de estos signos será necesario ir cuanto antes al veterinario.
Frutos secos tóxicos para perros
También existen algunos alimentos de este tipo que debido a su composición pueden resultar perjudiciales para los canes. Presta atención a qué frutos secos no deben comer los perros:
Nueces de macadamia
Según diversos estudios este alimento no es dañino para los canes en bajas porciones. Pero al excedernos en la cantidad que les ofrecemos, si les damos diariamente o si se comen las cáscaras este es uno de los frutos secos que más daño pueden hacer a los canes. En estos casos pueden producir debilidad, depresión, apatía, vómito, ataxia, temblores e hipertermia o fiebre, pudiendo producir problemas de salud secundarios graves.
Uvas pasas
Aunque no se trata de un fruto seco en sí, estas frutas deshidratadas suelen verse en el mismo conjunto porque solemos consumirlas a la vez que estos otros frutos y, por ello, tenemos dudas también respecto a dar pasas a nuestro peludo. Pero, es bastante conocido el hecho de que los perros no pueden comer uvas y, por el mismo motivo, tampoco pueden comer uvas pasas. Todavía se sigue estudiando cuál es el componente exacto de las uvas que puede ser el causante de esta reacción adversa, pero se han diagnosticado numerosos casos de intoxicación por uvas en perros en todo el mundo y se observan síntomas como vómitos, diarrea, letargo, anorexia, debilidad, niveles elevados de calcio, hiperfosfatemia y problemas renales.
Cómo dar frutos secos a mi perro
La mejor forma de dar de comer frutos secos a un can es dárselos picados o molidos, ya que si se los damos enteros su sistema digestivo apenas puede digerirlos y procesarlos bien por lo que no aprovechará bien los nutrientes o incluso no absorberá ninguno y los defecará enteros o prácticamente enteros.
Además, se aconseja dárselos crudos o ligeramente tostados, pero nunca con cáscara ni fritos ni con sal añadida pues en tal caso le harán más daño que beneficio. Las cáscaras no son digeribles y pueden quedar retenidas causando problemas y los alimentos fritos y con exceso de sal no son nada saludables para los canes, así como tampoco lo son para las personas.
Preguntas frecuentes sobre dar frutos secos a los perros
A continuación, queremos acabar de clarificar y despejar todas las dudas sobre algunas de las preguntas más frecuentes sobre los frutos secos para los canes:
¿Pueden comer castañas los perros?
Es algo común haber oído alguna vez que las castañas son tóxicas para los perros pero de nuevo no es verdad, sino que dependerá de si la comen muy verde, de si se comen la cáscara o bien de si comen muchas castañas de una sola vez. Que un can se coma un trozo o una castaña alguna vez como golosina no representa ningún peligro. Pero, en exceso, puede provocar diarreas, vómitos y dolores estomacales al can por lo que habrá que acudir al veterinario.
¿Los perros pueden comer pistachos?
Los canes sí pueden comer pistachos, pero como hemos apuntado antes no deben estar muy tostados ni con sal añadida y hay que dárselos sin cáscara y en poca cantidad. Es muy importante que para que nuestra mascota se beneficie de ellos sin que le sienten mal moderemos las dosis y vayamos variando de fruto seco cada poco tiempo que decidamos darle un poco.
¿Los perros pueden comer pipas?
Las pipas tanto de girasol como de calabaza son semillas y no frutos secos, pero como se suelen comer del mismo modo e incluso mezcladas con estos la duda sobre dárselas a nuestro peludo también se extiende a las pipas. Estas semillas en pequeñas dosis son buenas para los canes, pero siempre crudas o poco tostadas y sin sal extra. En el caso de las pipas de girasol es vital moderar su consumo puesto que tienen un elevado contenido en grasa y si nuestra mascota consume mucha cantidad puede no solo engordar sino que también enfermar.
¿Pueden comer anacardos los perros?
En una cantidad pequeña y no diaria sí se pueden dar anacardos a un perro, puesto que aportan mucha fibra, calcio, magnesio y varias vitaminas antioxidantes. Pero, si el can come en exceso debido a la cantidad de grasa y sodio que contienen estos frutos puede darse sed excesiva, vómitos, entre otros, además de producir malnutrición si se incluyen a menudo en la dieta en vez de otros alimentos básicos y esenciales para ellos.