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Por qué a los perros les gusta tumbarse al sol

Si tienes un perro seguro que muchas veces has visto cómo se tumbaba completamente para tomar el sol y disfrutar de un momento de relax y placer. Pero, además de tener un momento de calidez, los animales toman el sol por otros motivos como, por ejemplo, reforzar su organismo o aliviar el dolor de las articulaciones ¿lo sabías? A diferencia de los seres humanos que nos tumbamos al sol para disfrutar del calor y ponernos morenos, los perros lo hacen por otras causas un tanto diferentes y que en este artículo de unComo vamos a analizar. Sigue leyendo y descubre por qué a los perros les gusta tumbarse al sol, ¡te sorprenderás!

Para tener más vitamina D

Si quieres saber por qué a los perros les gusta tumbarse al sol lo primero que tenemos que saber es que los rayos que recibimos del astro resultan ideales para sintetizar la vitamina D. Se trata de un nutriente que contribuye en el proceso de disolver las grasas y los aceites que quedan almacenados en nuestro cuerpo durante más tiempo.

Para poder incorporar la dosis necesaria de esa vitamina en el organismo de los perros, estos lo pueden hacer mediante la comida pero, también, mediante la toma de sol. Así pues cuando veas a tu perro tumbado en el sol no pienses que solo está disfrutando de un momento de calor y relax sino que está aumentando sus reservas de vitamina D para que su cuerpo funcione al máximo nivel.

Además de conseguir reducir la presencia de líquidos y grasas, esta vitamina también mejora la absorción de fósforo y calcio, minerales que mejoran la salud de los huesos y, también, consiguen prevenir la aparición de enfermedades relacionadas con su estructura ósea. La musculatura también se ve fortalecida gracias a este nutriente ya que mejora su formación haciendo que, sobre todo las razas más corpulentas, puedan tener un soporte muscular mucho más fuerte y desarrollado.

Es frecuente que veas cómo el animal se lame las patas cuando está tomando el sol, ¿por qué hace esto? Porque la vitamina D no se absorbe directamente a través de la piel debido a que tiene una capa de pelaje que lo bloquea, así pues, la vitamina se transforma en aceite que se queda almacenado en el pelaje y el animal debe lamerlo para introducirlo en su organismo.

Para regular su temperatura corporal

Otro de los motivos más comunes por los que un perro se tumba a tomar el sol es para poder regular su temperatura. Es por este motivo por el que en épocas más frías, como otoño o invierno, es frecuente que los perros se pasen horas al sol para, así, poder entrar en calor. De todos modos, en verano también verás al animal tumbado aunque las temperaturas sean muy elevadas pues, como ya hemos indicado, existen muchos motivos que pueden hacer que el animal quiera tumbarse.

No obstante es importante que vigiles a tu perro en verano y controles su momentos al sol, deberás tenerle siempre disponible un cuenco con agua fría y animarle a moverse y salir del sol durante un rato. El motivo es que demasiado tiempo bajo los rayos podría producirle algún efecto adverso como, por ejemplo, mareos, náuseas o un golpe de calor.

Perros más felices gracias a tomar el sol

¿Sabías que gracias al sol tu perro puede ser más feliz? Esto es porque los rayos UVA consiguen estimular la producción de serotonina, una hormona que genera nuestro organismo de forma natural y que actúa como un neurotransmisor que consigue equilibrar el estado anímico y fomentar la sensación de bienestar en el animal. Se trata de uno de los componentes químicos que actúan como un antidepresivo natural y que conseguirán mejorar el humor del animal, que esté más vital y con ganas de jugar.

Cuando el animal se tumba al sol, los rayos consiguen aumentar la producción de esta hormona y, por ende, hacer que se sienta más animado y en plena forma. Este es otro de los motivos por los que a los perros les gusta tumbarse al sol: ¡porque se sienten más felices!

Un mejor descanso para nuestro can

Los rayos solares también promueven la segregación de otra hormona, la melatonina, que es la encargada de conseguir regular el sueño y mejorar los ciclos. Así pues, los perros también suelen tumbarse al sol para conseguir mejorar la calidad de sus sueños y disfrutar de unos momentos reparadores que les ayuden a estar más ágiles y despiertos durante el día.

Al tomar el sol, el perro está aumentando la calidad de las horas cada vez que duerme pero, además, también regula los ciclos y consigue dormir profundamente. Este es otro de los motivos por los que podemos ver a los animales tomando el sol tanto en invierno como en verano.

Menos dolor en las articulaciones

Y, para terminar, otro de los motivos por los que los perros más adultos suelen tumbarse horas y horas al sol es para poder aliviar el dolor de las articulaciones, una afección muy común en los animales de avanzada edad. Estos perros tienen un pelaje más débil y, por tanto, no están tan protegidos ante la temperatura externa, algo que puede producir que las articulaciones le duelan más y que sientan malestar durante más tiempo.

Al tumbarse al sol consiguen aliviar estas molestias gracias al calor que desprende el astro rey. Por tanto, si ves a tu can durante horas al sol (y es invierno), no te preocupes, tan solo está aliviando sus dolores.

Vigila los golpes de calor de los perros

Aunque a los perros les encante estar tumbados bajo el sol debes saber que son muy sensibles al calor y que deberemos ser precavidos. Recuerda que ellos no sudan y, por tanto, el calor que se acumula bajo la piel no puede eliminarse del mismo modo en el que nosotros lo hacemos y, precisamente por este motivo, son más propensos a padecer peligrosos golpes de calor que, en situaciones graves, puede ocasionar la muerte.

Mediante la respiración o los jadeos con la lengua afuera es como los perros intentan regular la temperatura corporal y, por este motivo, las razas como el pug carlino, el bulldog o el boxer son más propensos a esta afección porque tienen las fosas nasales más pequeñas y la entrada y salida de aire es más trabajosa.

Así pues, es importante que en épocas de calor evites pasear al can en las horas más calurosas así como dejarlos en sitios cerrados como coches o espacios pequeños. Siempre tendrá que tener un poco de ventilación y agua fría a su alcance para calmar su sed.

En el caso de que detectes que el perro está padeciendo un golpe de calor resulta de vital importancia que lo leves al veterinario de inmediato así como darle agua y llevarlo a un lugar fresco. Te recomendamos este otro artículo sobre Golpe de calor en perros: síntomas y tratamiento.