Una de las formas más comunes en las que perros y humanos estrechamos lazos es a través de las caricias y el cariño mutuo. Ellos adoran que les prestemos atención, pero de todos los gestos posibles sin duda uno de los que encuentran más placenteros es que les rasquen la barriga. En este momento de éxtasis el animal se siente genial, parte de la manada y atendido por la persona más importante para él: su sueño.
Pero ¿sabes por qué a los perros les gusta que les rasquen la barriga? Si siempre te lo has preguntado sigue leyendo, porque en este artículo de unComo te lo respondemos.
¿Qué significa que el perro nos exponga su barriga?
El perro nos muestra su barriga como una señal de sumisión y confianza, este gesto nos indica que el animal sabe quién es el alfa y que confía completamente en nosotros, sabiendo que no le haremos ningún daño. No hay que olvidar que esta postura denota gran vulnerabilidad, por lo que es una forma de que el animal nos diga que se siente a gusto con nosotros.
Sin embargo también es posible que mostrar la barriga sea una señal de sumisión impulsada por el miedo, en este caso también pueden observarse gestos como meter la cola entre las patas y lamer las manos del dueño. Esto lo puede hacer el perro ante otros animales más fuertes, cuando saluda a su dueño o frente a una persona que no conoce bien, por eso si el perro luce nervioso o tenso cuando te muestra su barriga lo mejor es no rascar al animal de inmediato, sino hacerlo cuando se sienta cómodo y en verdadera confianza.
El placer, la causa obvia de que lo disfrute tanto
Evidentemente esta forma de contacto con su dueño, con una persona en quien confían y a quien identifican como el líder de la manada, les genera placer, una razón simple de por qué a los perros les gusta que les rasquen la barriga. Para estas mascotas se trata de un acto que los tranquiliza y les aporta seguridad, estrechando los lazos con su dueño.
Una vez que hemos dejado claro en el apartado anterior que no todos los perros exponen su barriga para que los rasquen, tampoco todos los canes disfrutan de esta acción. Si has notado que tu animal solo te muestra su panza cuando está muy nervioso, con miedo o tenso, pero cuando intentas acariciarlo en la zona en otros momentos sencillamente se da la vuelta rápidamente, esto indica claramente que no disfruta de la acción, por lo tanto conviene respetarlo y no hacerlo.
Prueba acariciándolo en otras zonas como el lomo o detrás de las orejas, puntos usualmente placenteros para esta mascota.
Claves para acariciar al perro y que lo disfrute
- No acaricies a tu perro en la barriga cuando luce nervioso o con miedo. La reacción del animal puede ser impredecible y lo mejor es esperar a que se calme y se sienta en confianza para hacerlo.
- Acariciar a un perro es un acto en el que ambos deben sentirse a gusto y en confianza, por eso cuando se trata de un perro ajeno es importante permitir que el animal se acerque a nosotros, nos huela y se sienta a gusto con nuestra presencia, antes de darle una caricia. Comienza por zonas como el lomo, la cabeza o detrás de las orejas, pero si observas cualquier señal de rechazo por parte del animal, deja de hacerlo de inmediato.
- Si no conoces bien al perro acarícialo siempre con suavidad y nunca de forma brusca o podrías asustarlo. Las mascotas pueden responder sin problema a caricias bruscas por parte de sus dueños cuando están acostumbrados, pero un extraño es muy diferente por eso precaución.
- No le des al perro palmadas o chachetadas pues no es algo que disfrute, prefiere acariciarlo suavemente con las yemas de tus dedos o masajea su lomo o barriga con suavidad, seguro que lo disfrutará mucho más.
- Respeta siempre al perro, si detectas que hay una zona que no le gusta que le toquen no insistas o el animal podrá acabar reaccionando de forma negativa. Por más domesticado que esté se trata de un animal y no debemos olvidar que merece respeto y consideración.