Si tienes un minino de mascota ya sabes que son, en general, animales sociables y cariñosos. Aunque también hay momentos en los que buscan la soledad y puede parecer que rechazan claramente la compañía de sus dueños y llegues a plantearte que quizá tu gato está triste.
Aunque los felinos no hablen, se expresan de mil maneras que solo hace falta saber interpretar correctamente. Si te estás preguntando cómo saber si mi gato es feliz, lee este artículo de unCOMO porque recogemos y desciframos acciones y comportamientos gatunos que son síntomas inequívocos de que tu gato está muy a gusto en su entorno y, por supuesto, contigo.
Lenguaje corporal
La cabeza, la cola, las orejas, los ojos... parte de la fascinación que despiertan los gatos en muchas personas radica en que cada uno de sus movimientos o gestos quiere decir algo.
Un gato contento, por normal general, camina con la cabeza levantada, ligeramente hacia adelante (por su curiosidad innata) y lleva su cola también elevada, curvando ligeramente la punta. Esta postura indica que el minino está tranquilo y no se siente amenazado, algo muy parecido a la felicidad.
Panza arriba
Los gatos son bastante desconfiados y recelosos por naturaleza. Si el tuyo se tumba panza arriba, moviendo sus patitas, sin duda estás ante un gato contento, que confía en ti y busca juegos y caricias.
Aseo
Les encanta cuidar su pelaje y se lamen, una y otra vez, para dejarlo limpio y brillante. También asean con esmero sus patas y garras, pero lo hacen cuando se sienten bien y están a gusto.
Si un gato descuida sus rutinas de aseo, algo malo pasa y hay que estar atentos porque puede que, simplemente, esté triste o que esté padeciendo algún tipo de enfermedad no diagnosticada.
Corre y salta
Es una de las señales más evidentes de que tu gato no solo es feliz sino, además, rebosa salud y vitalidad. Es normal, sobre todo en los más jóvenes, que estos pequeños felinos comiencen a correr y a saltar como locos sin motivo aparente, por ejemplo cuando han estado un tiempo solos en casa y llega su dueño o cuando le sacas al jardín.
Esos saltos y carreras son toda una expresión de felicidad total. Si además, entre brinco y brinco, aprovecha para restregarse y enredarse en tus piernas, es que quiere que tú participes de su alegría.
Ronronea
El ronroneo en los gatos es una de sus formas habituales de expresión. No siempre indica que tu gato está feliz porque también pueden emitir este particular sonido cuando algo les molesta o están nerviosos.
En general, si tu gato ronronea mucho, sobre todo cuando le acaricias o se acomoda en tu regazo, no hay duda de que se siente bien.
‘Amasa’
Es un curioso gesto, propio de los gatos, que consiste en mover sus patitas delanteras, con suavidad y rítmicamente, como su estuviese ‘amasando’.
Pueden hacerlo para acomodarse en su camita o cojín y también en el momento que dan un salto, cuando tú estás sentada y se instalan entre tu abdomen y tus muslos. Si comienzan a ‘amasar’ tu barriga, para encontrar el hueco perfecto donde acoplarse y además ronronea, tu gato está en la gloria.
Responde al juego
Su instinto cazador hace que los gatos disfruten especialmente con juegos básicos como perseguir una pelota, trepar por un rascador o esconderse mientras tú les persigues.
Si están felices responden rápidamente a este tipo de estímulos, pero si están apagados y tristes nada conseguirá que vayan tras ese juguete que le ofreces.
Apetito
Como ocurre con otros animales y también con los seres humanos, la pérdida de apetito puede ser un síntoma de tristeza, depresión o enfermedad.
Maullidos largos y agudos
El maullido de los gatos tiene mil matices que no resultan siempre fáciles de interpretar. Pueden maullar cuando están nerviosos o tristes y también cuando están en época de celo.
Cuando un gato está contento, su maullido suele ser largo y además en un tono ligeramente agudo. Si lo hace cuando te recibe a tu llegada a casa, es que está muy contento de volver a verte.
Baja los párpados lentamente
Los ojos de los felinos son particularmente expresivos. Su pupila, más o menos dilatada, puede indicar un estado de alerta o bien una situación de relax.
A veces, se quedan tranquilos, tumbados mientras sus párpados parecen ir cerrándose, poco a poco, por efecto del sueño. Es, sin duda, un síntoma de estar a gusto pero, aunque no hay evidencia científica alguna, se dice que si el gato al mirarte parpadea muy lentamente, es que te está enviando un beso ¿será verdad?
Responde a las caricias
¿Cómo hacer feliz a un gato? Acaríciale suavemente, sobre todo debajo de su barbilla y, si acepta encantado tus mimos, seguro que en ese momento es el más feliz de los felinos.
No huye ni intenta escapar
Aunque, como hemos dicho, los gatos valoran mucho sus momentos de intimidad y también es cierto que cuando están en celo pueden intentar abandonar el hogar, en general, son animales a los que les gusta conocer y permanecer en su entorno.
Si un gato está constantemente intentando huir de una casa a la mínima oportunidad, el sentido común indica que algo provoca que no se sienta a gusto y por tanto no está siendo demasiado feliz en el lugar en el que está.