Si estás pensando en adoptar un gato debes saber que los mininos son animales sociables y cariños, que requieren su propio espacio y cierta independencia, pero que pueden ser excelentes mascotas. Hacerte cargo de un gato, acudiendo a una protectora o centro de recogida de animales, es una excelente idea que implica una responsabilidad que debes estar dispuesta a asumir. Son varios los aspectos importantes que tendrás que considerar para que la llegada del nuevo miembro de la familia sea todo un éxito y en este artículo de unCOMO queremos repasarlos, para que des el paso con total seguridad. Toma buena nota de qué saber antes de adoptar un gato.
Raza y edad
Puede que ya tengas claro el animal que te gustaría adoptar, por ejemplo, porque conoces a alguien que tiene un gato de una raza determinada, pero no siempre ocurre así. Antes de adoptar a un gato no está de más que obtengas algo de información sobre las características físicas (raza o mix de razas, por cuestiones básicas de su salud) y el carácter del gato que quieres como mascota. No todos son iguales. Hay gatos más tranquilos, más juguetones, más nerviosos...., aunque es algo que puede cambiar según su entorno, su edad y otros factores.
También es fundamental decidir si vas a adoptar a un gato cachorro o a un gato adulto, valorando las posibles ventajas e inconvenientes en cada caso. El gatito de pocas semanas se adaptará antes a las costumbres de la casa, pero también tendrás que armarte de paciencia para enseñarle rutinas básicas respecto a las comidas o el lugar donde hacer sus necesidades, algo que probablemente un gato adulto entenderá a la primera.
Estado de salud
Los centros como protectoras y asociaciones que se encargan de la recogida de animales para darlos en adopción son una garantía de que el animal ha recibido los cuidados necesarios que certifican su buen estado de salud. Otra opción es que alguien te regale un gato, al no poder hacerse cargo de él, o que incluso pienses en recoger y adoptar tú mismo un gato que veas abandonado en la calle pero que es cariñoso y se acerca mucho a ti.
En cualquier caso, es imprescindible una revisión veterinaria que confirme que el animal no padece ninguna enfermedad o que la detecte para poder tratarla, que verifique que está desparasitado y que le han sido administradas las vacunas pertinentes, que le protejan a él y también a las personas con las que va a convivir.
¿Macho o hembra?
Es otra cuestión sobre la que tendrás que decidir, sobre todo teniendo en cuenta los inconvenientes que pueden surgir especialmente en época de celo o con los cachorritos que pueda tener una gata y las escapadas a las calles en época de celo, tanto si hablamos de hembras como de machos. En cambio, no hay apenas diferencias entre gato y gata si están esterilizados o castrados, aunque sí hay diferencias entre gatos, pero que más bien se deben al carácter individual.
Para estar tranquilo, pregunta si el animal que te interesa está castrado o no y, si no es el caso, te recomendamos castrarlo o esterilizarlo. Por tanto, en estos casos, a fin de cuentas, no es tan relevante si adoptas un gato macho o hembra.
Si tienes delante a un gato pequeño o adulto y quieres saber si es de un sexo u otro, aquí tienes una guía sobre Cómo saber si un gato es macho o hembra.
Lo que vas a necesitar
En el momento en el que te lleves a casa a tu nuevo peludo tendrás que atenderle y es importante que hagas una pequeña lista y empieces a adquirir todo aquello que hará falta para lograr que él se sienta a gusto (y el resto de la familia también).
En primer lugar, piensa en cómo llevarlo a casa porque probablemente necesites un trasportín apropiado a su tamaño. Su comedero y bebedero, el arenero, algún cojín o cama donde pueda dormir, algún juguete, un rascador para que se afile sus uñas (y no lo haga en el sofá o en las cortinas) y las primeras provisiones de comida, en forma de latitas de comida, pienso para gato, o comida casera para gatos, son elementos que no pueden faltar en tu lista.
Microchip
Aunque es más frecuente en perros, poner a tu nueva mascota un microchip identificativo es una buena idea, ya que de esta manera será mucho más fácil recuperar al animal en caso de que se escape, se pierda o lo roben. En algunas comunidades autónomas españolas es obligatorio que los gatos lo lleven y también se exige como requisito para poder viajar con un gato a algunos países. Tenlo en cuenta.
Aquí podrás ver un vídeo en el que se explica Cómo son los microchips de perros y gatos.
¿Existe algún impedimento que desaconseje la adopción?
Es una pregunta que debes plantearte antes de dar el paso de adoptar a un gato. Por ejemplo, ten presente si algún miembro de la familia tiene alergia al pelaje de estos animales, si en tu comunidad de vecinos no se permite tener mascotas o si tienes un perro, otro gato u otro animal que se muestra especialmente agresivo ante la presencia de un felino.
En este último caso, llevar un gato a casa no es incompatible, sobre todo si es un cachorro, pero tendrás que tomar las debidas precauciones hasta que ambos animales se conozcan y lleguen a un entendimiento y una adaptación mutua que permita la convivencia tranquila. Para ello, puede que necesites la ayuda de un etólogo o educador.
Periodo de adaptación
Dependiendo de la edad y de las experiencias previas del animal, el periodo de adaptación será más o menos largo y más o menos complejo, pero es una variable que siempre debes tener en cuenta. Durante los primeros días, tendrás que ser paciente y darle al gato su espacio, permitiéndole ‘investigar’ su entorno al tiempo que le vas enseñando, poco a poco, las normas de la casa de forma positiva.
Tendrás que pasar tiempo con él, para que el vínculo entre vosotros se vaya afianzando, pero siempre sin agobiarle. Recuerda que el juego y el estímulo positivo (los pequeños premios cuando hace lo que crees que está bien) son el mejor camino para que el gato se integre rápidamente en la familia. Piensa que el momento de adoptar un gato es solo el principio de un camino de convivencia con un animal.
Precauciones en casa
Son traviesos, ágiles y curiosos, por lo que antes de adoptar a un gato es importante tomar algunas medidas y establecer nuevas normas o costumbres en casa. Por ejemplo, las primeras semanas no dejes nada de comida, que no quieras darle, a su alcance porque aunque creas que no llegará al filete que has dejado en la encimera, lo más probable es que acabe consiguiéndolo.
Cuidado también con los armarios, pues a los gatos les gusta esconderse en ellos y cerrar la puerta o cajón por un olvido podría causar más de un accidente. Aquí te contamos Dónde puede esconderse un gato.
También hay que tener precaución también con los calefactores y con los equipos electrónicos que el gato podría hacer caer accidentalmente, así como con los accesos al exterior, sobre todo si son ventanas o balcones de pisos altos, a los que hay que poner mallas.