La debilidad o fallo en las patas traseras de los gatos es uno de los síntomas que más se presentan en la vejez de los gatos, como en otros animales, aunque también pueden presentar este problema siendo más jóvenes por distintos motivos. Se caracteriza por ser un síntoma en el que el felino arrastra las patas, en lugar de afincar la planta de la pata y mantenerse bien en pie. Además, la cojera puede darse en una sola pata o en ambas.
Si tu gato comienza a presentar debilidad en su patas, y sobre todo si presenta más síntomas como perder el apetito a vomitar o a defecar fuera de su caja de arena, lo mejor es que acudas con tu veterinario para descartar cualquier complicación. No obstante, hoy en unCOMO te traemos las posibles causas que dan respuesta a tu duda sobre "¿por qué a mi gato le fallan las patas traseras?".
Estreñimiento crónico, causa común de que a un gato le fallen las patas traseras
Esto sucede más comúnmente en gatos que padezcan de insuficiencia renal, dando como consecuencia los problemas que conlleva el estreñimiento crónico, que se reflejan tanto en el sistema digestivo como en la parte baja de la espalda y las patas del animal. Cuando esto sucede el felino puede presentar un tambaleo en las piernas de atrás y problemas al caminar, además de debilidad a la hora de estar sobre sus cuatro patas.
Si se presentan síntomas como vómitos, falta de apetito o pérdida de peso, es importante tomarlo en consideración, y llevarlo a consulta veterinaria si se han mantenido por varios días, ya que si no se trata a tiempo, puede generar daños irreversibles en los intestinos, riñones, hígado y, con el tiempo, en todo el organismo del gato por el exceso de toxinas originados por la acumulación de heces.
Cardiomiopatía hipertrófica
O como también se le conoce, la miocardiopatía hipertrófica se presenta cuando hay algún engrosamiento en el músculo cardíaco, lo cual genera problemas cardiovasculares graves.
Cuando su sistema comienza a fallar, deja de llegar suficiente sangre a varias partes del cuerpo del gato, incluidas las patas traseras y la cola que quedan más alejadas del corazón, a razón de que el flujo sanguíneo se ve afectado y disminuye. Esto puede causar, según la gravedad de la cardiomiopatía hipertrófica, una parálisis parcial o total, ya sea progresiva o repentina, de dichas extremidades debido a que no cuentan con la sangre requerida para funcionar correctamente. Si este síntoma se presenta de un momento para otro conviene llevar al gato al veterinario, pero si además viene acompañado de pérdida de peso, lentitud motora, falta de apetito u otros síntomas, es necesario acudir a emergencias veterinarias.
Diabetes en gatos
Cuando se presenta una diabetes o una hiperglucemia en gatos (niveles altos de glucosa en sangre) bajan los niveles de potasio debido a la recurrencia con la cual acuden a miccionar u orinar. Estas bajadas bruscas de potasio, generan daños neurológicos y en muchos casos, llegan a neuropatías que requieren tratamientos y ejercicios. Dichos problemas a nivel neurológico pueden ser la causa de que a tu gato le estén fallando las patas traseras.
Además de la bajada de potasio en su sistema, los constantes cambios en sus niveles de glucosa pueden ocasionar daños a nivel cardiovascular, como bajadas de presión o subidas muy bruscas, haciendo que el cuerpo del animal comience a fallar.
Displasia de cadera, principal causa del fallo en las patas traseras de los gatos
Aunque no es tan habitual como en los perros, existen casos con este padecimiento. Una displasia de cadera en felinos tiende a ser hereditaria y consiste en un desarrollo anormal de los huesos de la cadera y el fémur, que provoca desplazamiento y daño en ambas articulaciones de la cadera o en una sola según cada caso. Este trastorno puede aparecer desde muy pequeño y con el paso del tiempo tiende a dislocarse mucho más ocasionando pequeñas fracturas o daños en los cartílagos de la parte inferior del gato. No obstante, algunas veces puede aparecer cuando el gato es más mayor, por causas que normalmente no son genéticas.
Los síntomas más comunes cuando se presenta de displasia de cadera en gatos son:
- Cojera
- Dolor en las patas traseras
- No salta ni corre
- Crujido proveniente de la cadera
Si además de la debilidad presenta estos síntomas, es importante acudir con el veterinario.
Trombosis
La trombosis consiste en un coágulo de sangre que se localiza en alguna zona del cuerpo. En el caso de los gatos puede presentarse una trombosis en la parte trasera del felino o específicamente en la cadera o piernas, ocasionando que la sangre no llegue bien a las patas y el flujo se detenga o reduzca, cuando esto sucede las extremidades traseras se tornan frías y con muy poca movilidad llegando al punto de parálisis.
Es una enfermedad que se da con más frecuencia en gatos con insuficiencia renal, por lo cual si tu gato padece de esto es de suma importancia tenerlo bajo vigilancia. De igual modo, si has notado que la movilidad es cada vez menor y que sus patas están más frías que el resto de su cuerpo, tómalo en cuenta y háblalo con el veterinario.
Otras posibles causas por las que a tu gato le fallan las patas traseras
El fallo en las patas traseras de los gatos pueden llegar a ser un indicio de que algo malo está pasando con nuestro amigo y así como puede ser por alguna de las afecciones anteriormente mencionadas, existen otras patologías que, aunque en muy pocas ocasiones presentan dicho síntoma, pueden afectar a la movilidad en las patas traseras del gato.
- Cáncer
- Leucemia
- Virus Inmunodeficiente Felino (VIF)
- Peritonitis infecciosa
Aunque para estas enfermedades se presenta otra sintomatología antes que la debilidad en las patas de atrás, no está de más llevarlo con el veterinario para descartar cualquier posible anomalía y en dado caso de que se presente, tratarlo lo más pronto posible y así evitar alguna complicación.
Además, otras causas comunes de la cojera en las patas de atrás en los gatos son las fisuras y las fracturas en los huesos de las patas o la cadera.
Qué hacer cuando comienzan a fallar las patas traseras del gato
El fallo en las patas traseras puede aparecer solo como una debilidad en la zona inferior o estar acompañado de otros síntomas. Es indispensable acudir a un veterinario para que descarte cualquier lesión o fractura y partiendo de aquí realizar los exámenes correspondientes para llegar a un diagnóstico.
Este síntoma de fallo en las patas puede ser indicio de muchas patologías; hay muchos casos donde se presenta lesiones a nivel medular, inclusive hernias discales las cuales puedes causar una parálisis completa en el animal.
Aunque no lo creas, muchos animales pueden sufrir de diabetes mellitus y al igual que los humanos verse involucrados en un desequilibrio del cuerpo en general. Es importante notar si en conjunto a la debilidad de las patas traseras, el felino toma más agua de la normal y orina con más frecuencia.
En la mayoría de los felinos, los problemas cardiovasculares o neurológicos llegan a afectar sus extremidades, de ser este el caso, es importante palpar las patas del gato para evaluar si se encuentran frías o con un pulso deficiente, si esto sucede, hay que acudir con urgencia al veterinario.