La administración de medicamentos en gatos no es tarea fácil, pero si tu gato ha de empezar un tratamiento tendrás que aprender la manera más sencilla de darle la medicación que requiera. Si para que tu gato se ponga bien necesita algún tipo de jarabe, te recomendamos que sigas leyendo para que no tengas ningún problema. En unComo.com te contamos cómo dar jarabe a un gato.
Pasos a seguir: 1Generalmente es mucho más sencillo dar medicamentos líquidos que pastillas a un gato, aunque es verdad que cada gato tiene un nivel de tolerancia a la administración de fármacos. Para empezar tienes que tener en cuenta que los jarabes tienen un olor muy fuerte y habrá que camuflar un poco con algo de comida húmeda. Es una buena recomendación para mezclar con el jarabe y a tu gato le llamará la atención.
Coge un cuenco, elige un paté que sea muy sabroso, pon la dosis de jarabe recetada y después cubre por completo con la comida húmeda. Verás como tus gatos se acercarán con mucha curiosidad y rebañarán el recipiente.
2Otra manera de dar jarabe a un gato es con una jeringa de plástico si el líquido no es demasiado espeso puede ser un buen método para administrarle esta medicación. Tendrás que poner la dosis prescrita dentro de la jeringa (sin aguja), coger a tu gato en brazos, coger su hocico y mantenerlo inclinado hacia arriba. No hará falta que le abras la boca, bastará con introducir la punta de la jeringa por un costado de la boca y con cuidado se va apretando para que vaya tragando el líquido sin riesgos.
Debes tener mucho cuidado porque mientras sienta el jarabe puede sentir el impulso de no querer tragarlo y ante todo no debes introducir muy rápido el medicamento porque podría desviarse a los pulmones.
3Se suele considerar que los líquidos son una forma muy rápida, fácil y efectiva de dar medicamentos a felinos pero si se hace con poco cuidado puedes tener algún susto. De hecho, el jarabe suele ser un formato que los gatos rechazan con mucha facilidad, puede ocurrir que una vez le introduzcas el jarabe en la boca, empiecen a regurgitar y hacen una gran cantidad de espuma por la boca.
Es una reacción de rechazo y desagrado extrema, en ese caso, se recomienda que diluyas el jarabe con un poco de agua y vuelvas a intentar administrarle con la jeringa la medicación.
4Una última recomendación para darle un jarabe a tu gato es que uses la técnica de la momificación que consiste en envolver a tu gato en una toalla. Es un truco que te ayudará a mantener a tu gato quieto e incluso más relajado y seguro. Tienes que tapar todo el cuerpo de tu gato, y dejar su cabeza al descubierto; es un método muy útil para dar todo tipo de medicamentos, incluyendo un jarabe. Al tenerlo envuelto así, evitarás que haga tracción, te arañe o que se escape.
Puedes colocarlo sobre una superficie elevada para que puedas agarrarlo con una mano y con la otra coger la jeringa. Si no puedes solo, pide ayuda a alguien para que sostenga a tu gato, mientras introduces la jeringa en el costado de su boca. Recuerda que al final debes darle un buen premio por su cooperación, acaríciale y hazle saberlo bien que lo has hecho.