EsHowto >> Mascotas >> gatos

Cómo tratar a un gato estresado

La mayoría de los humanos tenemos una imagen del gato como una mascota relajada, siempre tumbada en un cojín, la cama o un sofá, vaga y tranquila. Sin embargo, el gato es uno de los animales que con más facilidad puede verse envuelto en cuadros de estrés. Estos felinos son especialmente sensibles a los cambios en su rutina y, cuando se sienten agobiados, el animalito puede sufrir muchísimo. En unComo.com te enseñamos cómo tratar a un gato estresado.

Pasos a seguir: 1

Lo primero que debes saber es cómo identificar a un gato estresado y, aunque te parezca mentira, existen ciertas manifestaciones muy comunes que nos orientarán sobre el estado de salud de nuestro gato y nos pondrá sobre la pista. Si crees que tu gato puede sufrir estrés, no dudes en pedir ayuda a su veterinario.

2

Entre los síntomas más habituales que muestran los felinos bajo situaciones estresantes están los siguientes:

  • Marcaje territorial, tanto con orina como con arañazos, a veces a pesar de estar castrado.
  • Cambios en el apetito, desde anorexia hasta ingesta compulsiva.
  • Agresividad.
  • Cambios en el pelaje, entre ellos pueden verse afectados por una caída excesiva del pelo, calvas o incluso arrancarse el pelo ellos mismos.
  • Carácter huidizo, ocultamiento y rechazo de contacto.
  • Maullidos constantes.
  • Hiperactividad y nerviosismo.
  • Hacer sus necesidades fuera de su caja.
3

El otro bloque de manifestaciones físicas del gato estresado están más ligadas a problemas de salud:

  • Diarreas frecuentes.
  • Temblores.
  • Vómitos.
  • Pupilas dilatadas.
  • Cistitis intersticial idiopática.
  • Infecciones recurrentes.
  • Problemas de piel.
  • Asma.
4

El gato estresado también suele presentar un aspecto distinto al de un gato sano. Generalmente suele colocar las orejas hacia atrás, mostrar una expresión triste y desencajada, llevar la cola caída y moverse con mucho miedo. Precisamente porque esta sintomatología puede ser propia de otras enfermedades, resulta muy importante que consultes al veterinario para descartar otras dolencias.

5

La mejor manera de prevenir el estrés en los gatos es proporcionarle a la mascota pautas socializadoras desde cachorros, este es el modo de habituarles a la presencia de otros humanos y también de otros animales. Recordad que justamente la presencia de otros gatos y las rivalidades que se producen entre ellos es una de las principales razones de gatos estresados.

6

Resulta fundamental evitarles cambios bruscos de rutina, como viajes, muchos gatos en la misma casa o demasiadas visitas. El gato es un animal de costumbres muy ancladas y variar su rutina acabará haciéndole perder los nervios. Por ello es necesario que respetes sus tiempos y sus hábitos, por supuesto siempre que no sean de índole negativo, algo que con paciencia y educación podremos reconducir.

7

Habilitarles un espacio adecuado y, en la medida de lo posible, amplio y cómodo, donde pueda aislarse cuando lo necesite y relajarse un rato, va a dar oxígeno a nuestra mascota. Como dueño de un gato deberías ponerte en su lugar y pensar como un gato, ya que los felinos necesitan sus momentos y, aunque sean cariñosos, también hemos de respetar cuando el animal quiere estar solo y 'escondido'.

8

Además puedes proporcionarle a tu amigo juguetes para que se pueda entretener y rascadores para gatos que le ayuden a liberar tensiones y a marcar sobre el objeto adecuado. No le dejes solo durante periodos muy largos, porque son animales que añoran mucho a su amo. Si a pesar de todas estas prácticas, tu mascota no mejora, deberías valorar con su veterinario la posibilidad de un tratamiento con medicamentos.