En los felinos la castración es uno de los procesos más comunes, en el caso de las hembras se esteriliza para evitar la reproducción que generalmente lleva al incremento de gatos abandonados, en el caso de los machos este procedimiento reduce su agresividad y territorialidad, controlando ciertas conductas. Pero después de la intervención nuestro animalito requiere de ciertos cuidados, por eso en unComo.com te explicamos cómo cuidar a un gato esterilizado después de la operación.
Pasos a seguir: 1Lo primero que es importante tener claro es que la esterilización o castración es una medida responsable para evitar la reproducción excesiva de gatos y su posterior abandono. Todo dueño debe plantearse en algún momento tomar esta decisión y al hacerlo no le estás causando ningún daño a tu mascota, por eso no te sientas culpable y asume el procedimiento como una alternativa para prevenir la reproducción irresponsable y las actitudes agresivas y territoriales en el caso de los machos.
La castración o esterilización, aunque muy común, es un proceso que debe ser realizado exclusivamente por un veterinario y que requiere de anestesia total, por lo que después de la intervención es importante brindar atención a nuestro animal para que se recupere de forma rápida.
2Durante al menos día y medio o dos días intenta que tu gato no se mueva demasiado, aunque el animal no puede razonarlo se encuentra convaleciente y sus movimientos están limitados. Si hay algún hueco o escondite en el que sepas que le agrada ocultarse mejor limita su acceso o podría hacerse daño.
3Un par de horas después de la operación tu gato ya podrá comer y beber, pero no puedes administrarle las cantidades habituales de alimento y líquido pues el animal se encuentra convaleciente. Reduce sus porciones de comida y líquido a la mitad de lo normal al menos durante los primeros días.
Ten en cuenta también que tu gato estará sensible, irritable, adolorido y malhumorado, esto es completamente normal y no hay motivo para preocuparse. Puede que el gato rechace el cariño o esté un poco hostil, no tiene nada contra ti, solo que entre los efectos de la anestesia y las molestias es posible que no esté de muy buen humor, sé paciente que pronto pasará.
4También es importante vigilar que el animal no se lama, muerda o toque de alguna forma los puntos, pues podrían reventarse y ocasionar un problema mayor, en este aspecto deberás estar al pendiente. Consulta a tu veterinario acerca de las mejores formas de evitarlo.
5Es normal que tu gato no quiera comer con demasiadas ansias, acaba de salir de una operación y se siente débil y adolorido. Ten paciencia y vigila que al menos consuma líquido y algo de pienso, también puedes ofrecerle alimento enlatado que además de contener líquido, es mucho más suave y sabroso para el animal .
6Observa a tu mascota y dale cariño y atención. Es importante estar alerta a sus reacciones, si por algún motivo observas que la herida sangra, que el animal está débil, o que tiene síntomas atípicos como vómitos o diarrea, consulta de inmediato a tu veterinario.
7Los felinos que son castrados tienen tendencia a engordar, por eso resulta importante controlar su dieta desde las primeras semanas después de la operación. Descubre las claves para hacerlo en nuestro artículo cómo alimentar a un gato esterilizado.